Recientemente ha fallecido el investigador japonés Masaru Emoto. Conocido por sus descubrimientos de las propiedades del agua de como es capaz de guardar información y ser modificada a nivel molecular mediante la intención del observador .
La primera vez que conocí la labor de Emoto fue por medio de la película Y tú que sabes?, donde muestra la exposición que hizo de fotografías de moléculas de agua en Nueva York. Era fascinante ver cómo con sólo poner un letrero a un recipiente de agua con palabras positivas y otros con palabras negativas eran capaces de modificar la estructura del agua creando imágenes bellas una vez fotografiadas al microscopio.
No sólo es revelador el ver cómo el agua almacena la información de lo escrito en los recipientes, lo más importante es tener constancia científica de cómo la intención del observador es capaz de modificar la materia. Y es que el cuerpo humano esta compuesto por un 80% de agua, de modo que imaginemos del impacto de nuestros pensamientos sobre nuestra estructura.
Masaru Emoto con sus descubrimientos ha conseguido añadir una pizca más de luz a la conexión entre mente y materia, y sirve como entre otros descubrimientos a entender que es posible la sanción por medio de nuestra mente e intención. Aunque realmente no sepamos todavía el resorte exacto que hace que podamos cambiar nuestra realidad con sólo observarla si que la ciencia esta siendo testigo de los efectos. SAAMA del mismo modo que otras medicinas cuánticas hace uso de estos instrumentos para conseguir borrar los bloqueos de los consultantes para así permitir resolver los procesos.
Muchas gracias por esta gran labor.